“Turismo creativo, Turismo Naranja … ¿la solución al turismo post-covid?”

“Entrevista con Caroline Couret, fundadora de Creative Tourism Network®

(se puede reproducir total o parcialmente, citando las fuentes)

 

“¿Es el turismo creativo, la nueva navaja suiza para el turismo post-covid?”…

Es lo que sugiere Caroline Couret, fundadora de Creative Tourism Network®.

Nos da más detalles sobre este tipo de turismo y las oportunidades que nos brinda.

 

 

– Se está hablando cada vez más de turismo creativo, turismo naranja, pero quizás sería necesario enpezar con una definición de dicho concepto.

Efectivamente. Fue definido en los años 2000, por los profesores Greg Richards y Crispin Raymond, como “Turismo que invita el viajero a desarrollar su potencial creativo participando activamente en experiencias relacionadas con la cultura local”. Así, es una forma de turismo que permite descubrir pero sobre todo comprender el ADN de un lugar, participando activamente en actividades creativas con su población.
Ser silletero por un día en Medellín o participar en una torre humana en Barcelona, crear esculturas de hielo en Saint-Jean-Port-Joli (Quebec), hacer sus cosméticos con rosas en Gabrovo (Bulgaria), ensayar las coreografías del carnaval en Recife (Brasil), hacer su sombrero de toquilla en Quito, …! son sólo unas pocas, entre una infinidad de experiencias que se convierten en motivos de viaje!
Además de la experiencia en sí, también es importante el ecosistema que genera. De hecho, los destinos consideran el turismo creativo como una palanca para el desarrollo sostenible del  territorio, en particular para desestacionalizar y alargar las estancias, diversificando la oferta, optimizando simplemente los activos del lugar, mediante la creatividad.

 

  • El turismo creativo, que ha crecido significativamente en los últimos años, ahora parece ofrecer soluciones para destinos en el horizonte post-covid. ¿Por qué?

    Primero que nada, quiero poner mi respuesta en perspectiva. La crisis de salud que estamos viviendo es dramática y la crisis económica será asimismo dramática, especialmente para el sector turístico. Por eso no pretendo, con mis respuestas, resolver una situación de esta magnitud. Pero dado que estamos hablando de tendencias a consolidar, sin duda puede ayudar a reiniciar el turismo. De hecho, desde su teorización a principios de la década de 2000 por los profesores Greg Richards y Crispin Raymond, se ha desarrollado considerablemente respondiendo, por un lado, a la demanda de los viajeros en busca de significado y autenticidad, y por otro lado, en busca de soluciones, por parte de los destinos que deseen hacer del turismo una palanca de desarrollo sostenible para su territorio. El contexto actual está precisamente en proceso de resaltar un retorno de los valores humanos, de la solidaridad, de la verdad, dentro de la sociedad. También obliga a los destinos a atraer a un público local, el “famoso” staycation, a través de experiencias para ser disfrutadas en pequeños grupos que ofrecen un cambio de escenario a pocos kilómetros de casa. Y todo esto, con una implementación muy rápida!

 

  • Eres francesa pero expatriada ¿cómo percibes el potencial de Francia en términos de turismo creativo?

    La diversidad cultural de Francia, sus tradiciones y conocimientos, son un activo considerable para el turismo creativo y viceversa. Este turismo permite preservar y valorizar este patrimonio inmaterial y fortalecer la identidad de cada región. Además, es una forma de turismo que se adapta perfectamente a todo tipo de destinos, ya sean pueblos, ciudades, balnearios, balnearios, islas, etc. ya que consideran al turismo como un elemento integrador y no como un sector “depredador” como hemos llegado a entender. Nuestra red también incluye pueblos de 3000 habitantes, regiones rurales o megalópolis como Medellín, que a pesar de sus diferencias, ¡comparten sus mejores prácticas y sus públicos! De hecho, es importante subrayar que el turista creativo prioriza la forma de viajar y la calidad de las relaciones con los lugareños, a las características intrínsecas del destino. Por tanto, puede ser polivalente en la elección de sus destinos, siempre que estos criterios estén garantizados. Es a partir de esta observación que creamos la Creative Tourism Network®.

    En cuanto a Francia, pronto se nos unirán nuevos destinos y territorios, habiendo recurrido al turismo creativo para atraer el turismo local durante el desconfinamiento. Si trabajar con destinos tan diversos alrededor del mundo es muy enriquecedor humanamente, como mujer francesa, es un verdadero placer dar a conocer la riqueza cultural de nuestro país, sus artistas, sus artesanos y sus habitantes, sus arte de vivir!

 

  • Mencionaste la Creative Tourism Network®, ¿cómo nació y cuáles son sus principales misiones?

    Se podría decir que el proyecto formaba parte de nuestro ADN, con nuestro equipo hasta entonces trabajando en proyectos de cooperación internacional y yo personalmente siempre había viajado por este camino, priorizando reuniones y descubrimientos creativos. El encuentro con el profesor Greg Richards, teórico del concepto de turismo creativo, fue decisivo y permitió identificar con gran agudeza las exigencias de estos nuevos viajeros, pero también los retos que plantea esta nueva demanda. Ya habíamos creado la primera plataforma de este tipo a escala de ciudad, Barcelona, para proporcionar experiencias creativas a estos nuevos viajeros. La idea de trabajar en red con otros destinos parecía obvia!

 

  • Específicamente, ¿podría contarnos más sobre los desafíos de esta nueva solicitud?

    La especificidad de esta demanda ha tenido un efecto disruptivo en toda la industria del turismo. Al convertir el modelo top-down, que respondía a las características del turismo “fordista”, por un modelo bottom-up, dando protagonismo a viajeros y prosumidores más “experimentados”, la emergencia de un nuevo paradigma ha hecho imprescindible la ‘incorporación de nuevos actores, como artistas, artesanos, agricultores, organizadores de fiestas tradicionales, entre otros, capaces de transmitir sus conocimientos necesarios para el diseño y realización de experiencias. Uno de los grandes retos es adaptarse a este nuevo modelo, teniendo en cuenta que la co-creación entre actores de sectores tan diversos plantea nuevos retos, pero también ofrece nuevas oportunidades.

 

  • ¿Empezamos con los desafíos?

    El primer desafío está precisamente relacionado con el diseño de experiencias que sean a la vez auténticas, creativas y rentables, partiendo de activos tan intangibles como eclécticos. Si se reconoce que el “turismo” y la “cultura” ya luchan por encontrar – o aceptar – sus respectivos roles, en la promoción del turismo cultural, podemos imaginarnos fácilmente de qué se trata la co-creación entre l industria turística y sectores como la artesanía, las industrias creativas o la agricultura. A pesar de que nuestros “Dream Makers”, como me gusta llamarlos, quienes son estos artesanos, estos artistas, muestran una gran generosidad a la hora de compartir sus conocimientos, la experiencia creativa, para ser satisfactorios, debe cumplir con otros criterios, relacionados con la protección del patrimonio inmaterial, el marketing y, lo que es más importante hoy, la seguridad. Esto, por tanto, requiere la intervención de nuevos “mediadores”, que permitan conciliar o incluso crear sinergias a partir de estas diversas contingencias.

 

  •  ¿Suena simple, después de todo?

    ¡Digamos que puede ser tan simple y complicado como lo son las relaciones humanas! Pero lo cierto es que los valores humanos y la creatividad son recursos que solo pueden enriquecerse durante ese proceso. ¡Entonces podemos decir que no hay turismo más sostenible que el creativo!
    Además, en todos los territorios con los que trabajamos se ofrece formación a los actores locales, lo que les permite actualizar sus competencias para adecuar su actividad de la forma más autónoma y “orgánica” posible, insertándose en los canales de comercialización que serán tour operadores, agencias de viajes o incluso plataformas digitales.

 

  • ¿Qué medios está implementando para lograrlo?

    Nuestra red sin ánimo de lucro se ha convertido en un referente de este tipo de turismo. Esto supone, por tanto, hacer un seguimiento del sector y sobre todo escuchar a todos los agentes que se suman a él, sean viajeros, con los más diversos perfiles, de territorios gobernados por el la administración pública o el sector privado.
    Para ello, estamos desarrollando herramientas que les puedan aportar soluciones concretas y, al mismo tiempo, permitir estructurar este sector a escala global.
    Se trata, por ejemplo, de la creación de la CreativeTourismAcademy que diseña y proporciona formación a medida, tanto académica como profesional, los CreativeTourismAwards que cada año premian las mejores iniciativas de turismo creativo, así como por supuesto, nuestras misiones permanentes en términos de asesoramiento, apoyo y promoción a nuestros destinos etiquetados como CreativeFriendlyDestination.

 

  • ¿Qué te hace pensar que el turismo creativo no es solo una moda pasajera?

    Desde sus inicios, el turismo creativo ha seguido creciendo en número y decayendo en diferentes perfiles, pasando del viajero solitario y romántico que pintará en Toscana, a una forma de viaje que atrae a segmentos como los solteros, seniors, team building, PANKS, por supuesto, millennials, así como todos aquellos apasionados por el baile, la alfarería, el tejido, los aspirantes a ganadores o los chefs en ciernes.
    Por tanto, no se trata de una tendencia impulsada por la industria del turismo, sino de un cambio social, que actúa a nivel de demanda y repercute en la oferta turística.
    También es importante destacar que en esta evolución, los consumidores, en este caso los turistas, se han convertido en “prosumidores”, participando en la co-creación de sus propias experiencias, y que por tanto es imposible relegarlos nuevamente al simple estado de clientes. La pirámide de Maslow está evolucionando, ¡y el turismo con ella!

 

  • Para finalizar, ¿qué consejo daría a los destinos que deseen desarrollar este tipo de turismo?

    Antes que nada, olvidarse del marco que ha estructurado la industria turística hasta el día de hoy. De hecho, incluso sería preferible no considerar el turismo creativo como turismo, sino como una forma de crear cadenas de valor en los territorios, satisfaciendo – a través de la creatividad – las demandas más diversas, pero genuinas por naturaleza.
    Como mencioné, esto implica una gran empatía natural, tanto por lo que se refiere a las relaciones con los turistas, como en las que se derarrollan entre colaboradores del programa. Todos harán un papel importante y todos serán complementarios y virtuosos entre ellos. El artista, el artesano, el empresario, las instituciones.
    Por ello, es importante no reducir la gestión del turismo creativo a la creación de simples plataformas digitales, dedicadas exclusivamente a la venta de actividades online. Pueden ser parte de la cadena, pero debemos aprovechar esta gran oportunidad para crear sentido y valor a nivel del territorio! En particular a través de la narración. La narrativa debe ser la de los actores, es decir la población en su conjunto, que compartirán su historia, pasada o contemporánea, y crearán vínculos emocionales con los viajeros. Es también, para los destinos, la oportunidad de diferenciarse a través de la recreación de su ADN, de una identidad que ha tendido a ser suplantada en las últimas décadas por una oferta turística y cultural globalizada. Esta diferenciación debe conducir también a la cooperación entre destinos, sean los que sean, que tienen todo que perder como competidores por los primeros puestos, y mucho que ganar, recomendando a los demás y trabajando en red.
    Y como se trata de poner manos a la obra, hacerlo con ilusión y sin preocupaciones, empecemos por tranquilizarnos: todo ya está hecho y solo está a la espera de ser revalorizado. Economía circular y humanismo como receta post-crisis.

  • + info: press@creativetourismnetwork.org

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